Limpieza de máquinas con gas

Limpieza de máquinas en la industria

La limpieza criogénica se utiliza en aplicaciones de limpieza en máquinas, desde las industriales hasta las aeroespaciales. Las especialidades de la construcción incluyen la eliminación de moho, la restauración de incendios y la restauración histórica.
Las tecnologías de limpieza abrasiva van y vienen.

La limpieza criogénica ofrece una tecnología abrasiva que va y viene casi simultáneamente.

Los gránulos de dióxido de carbono congelados hacen el trabajo abrasivo y luego se subliman, transformándose de sólido a gas en una fracción de segundo, sin dejar residuos.

“A la gente le gusta decir que algo no es ciencia espacial, pero en este caso sí lo es”, dice Roger White.

“La tecnología fue plenamente desarrollada en los años 80 por Lockheed para limpiar a chorro los depósitos de combustible del transbordador espacial”.

Limpieza de máquinas

La limpieza criogénica con hielo seco se utiliza en numerosas aplicaciones de limpieza, desde las industriales hasta las aeroespaciales. Las especialidades de la construcción incluyen la eliminación de moho, la restauración de incendios, la restauración histórica, la eliminación de pintura con plomo, la limpieza de madera, la restauración de tejados y la limpieza de equipos pesados.

El dióxido de carbono utilizado para fabricar el hielo seco es un subproducto de otros procesos químicos.

  • El gas se expande para formar “nieve” de CO2 a -79 grados Celsius y luego se convierte en pellets de hielo seco del tamaño de un grano de arroz.
  • Los pellets se suministran en lotes de hasta 250 kilogramos dentro de contenedores de plástico aislados que pueden conservarlos hasta una semana.

El equipo necesario para la limpieza criogénica de máquinas es similar al de otros sistemas de suministro de medios abrasivos.

Los técnicos utilizan un compresor de gran volumen para hacer pasar los pellets por una boquilla y expulsarlos a velocidades supersónicas.

Los pellets eliminan el contaminante de dos maneras, dice White.

En primer lugar:

  • Proporcionan una fricción abrasiva al golpear la superficie, y luego proporcionan una fuerza explosiva adicional al sublimarse, expandiéndose hasta 400 veces su volumen en la superficie del lugar de limpieza.

“La limpieza con arena es similar al uso de un punzón, mientras que la limpieza con hielo seco es similar al uso de una espátula”, dice. “La arena corta o cincela el contaminante, mientras que el hielo seco ayuda a levantarlo”.

Máquinas de limpieza

Los trabajadores llevan equipo de protección para evitar la abrasión, pero sólo usan respiradores para asegurarse de que no respiran las partículas de la superficie que están limpiando.

“Como los gránulos están tan fríos, te queman la piel si los agarras”, dice White. Se forman los trabajadores en el manejo del CO2, pero a no ser que estén en un espacio pequeño y cerrado, el dióxido de carbono no es un problema y no necesitan respiraderos. El CO2 es más pesado que el aire y se disipa rápidamente”.

 

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